Escrito por La tendencia de dormir en el suelo ha ganado popularidad en los últimos años, con numerosos defensores que alaban sus beneficios para la salud, particularmente en relación con la salud de la columna vertebral.
Se argumenta que esta práctica promueve una alineación adecuada de la columna y mejora la calidad del sueño. Sin embargo, ¿cuán fundamentadas están estas afirmaciones? ¿Realmente es bueno dormir en el suelo para la espalda?
Investigaciones recientes sugieren que esta práctica podría no ser tan beneficiosa como se piensa, y podría incluso ser perjudicial para individuos con ciertas condiciones de espalda. A continuación, profundizaremos en las razones detrás de estos hallazgos.
¿Dormir en el suelo es bueno o malo?
Los expertos en salud y sueño han establecido que dormir en el suelo, especialmente de forma regular, puede ser perjudicial. Esta práctica puede acarrear complicaciones tanto para la espalda como para la salud general del individuo.
A pesar de que a veces se compara dormir en el suelo sin colchón con las costumbres de nuestros ancestros, los expertos señalan que tal paralelismo es inapropiado.
La fisiología humana ha evolucionado significativamente a lo largo de los años, lo que hace que esta comparación sea inválida. Los principales motivos por los que se desaconseja dormir en el suelo incluyen:
- Puede ser dañino para la salud de la columna vertebral.
- El cuerpo puede absorber el frío del suelo, lo que es perjudicial para la calidad de descanso.
- La transpiración del cuerpo se ve afectada.
- Existe el riesgo de experimentar dolor de espalda, rigidez y lumbalgias severas.
- No es una práctica higiénica, ya que incrementa la exposición a ácaros, hongos, moho y bacterias.
Mejores colchones para dormir en el suelo
Elegir un colchón para dormir en el suelo requiere considerar varios factores clave para garantizar comodidad y soporte. A continuación, mencionaremos algunos consejos:
- Firmeza adecuada: Un colchón firme suele ser más adecuado para dormir en el suelo. Ofrece un buen soporte y evita que el cuerpo se hunda demasiado, manteniendo así una correcta alineación de la columna. El colchón Techno de What The Sleep es un modelo ideal para dormir en el suelo.
- Material duradero: Busca materiales resistentes y de alta calidad. Los colchones de espuma de alta densidad, como la espuma viscoelástica o la espuma de poliuretano, son buenas opciones ya que ofrecen durabilidad y un soporte adecuado. Los colchones Liroon son uno de los productos de mayor calidad en el mercado.
- Espesor: Un colchón con buen grosor proporciona amortiguación entre tu cuerpo y el suelo. Generalmente, un colchón de al menos 20 cm de grosor es recomendable. Una buena opción es el colchón Morfeo XL.
- Facilidad de almacenamiento: Si planeas guardar el colchón durante el día, considera opciones más ligeras y flexibles que sean fáciles de enrollar o plegar. Los colchones hinchables pueden ser una gran alternativa.
- Transpirabilidad: Es importante que el colchón permita una buena circulación del aire para evitar la acumulación de humedad y calor, especialmente si el suelo es frío o húmedo. El colchón Hypnia Esencial es uno de los productos más transpirables gracias a su funda transpirable Coolsoft.
- Cubierta duradera y lavable: Una cubierta resistente y fácilmente extraíble para su limpieza ayudará a mantener el colchón en buen estado, especialmente al estar en contacto directo con el suelo. El colchón Khama Original, además de ser desenfundable y lavable, cuenta con una tapa reversible para invierno y verano.
- Hipoalergénico y resistente al moho: Para aquellos con sensibilidades o alergias, es importante que el colchón sea hipoalergénico y resistente al moho y a los ácaros. Busca colchones con certificaciones que garanticen la ausencia de sustancias nocivas. Si lo que buscas es un producto higiénico y 100% natural, los colchones de Kipli pueden ser tu mejor opción.
¿Es bueno para la espalda dormir en el suelo?
Numerosas personas enfrentando dolores de espalda, optan por acostarse directamente en el suelo con la creencia de que una superficie rígida puede aliviar su malestar.
Sin embargo, investigaciones recientes indican que dormir en el suelo no garantiza una alineación correcta de la columna vertebral, lo que podría incluso empeorar y potenciar el dolor.
La práctica de dormir en el suelo somete a la columna a un estrés continuo, lo que podría desencadenar problemas significativos en la espalda, las vértebras y la zona lumbar, especialmente si se hace regularmente.
Buscar un consejo experto sobre si dormir en el suelo es bueno
Es fundamental reconocer que no toda la información disponible en internet es fiable o precisa. En la mayoría de los casos, lo más aconsejable es buscar la opinión de un experto que pueda evaluar y aconsejar sobre la pertinencia de cualquier práctica que se esté considerando.
Es crucial no basar decisiones en la información generalizada que se encuentra en línea, especialmente si estás pensando en adoptar nuevos hábitos o prácticas.
La información de internet, al ser general, puede no ser aplicable a situaciones particulares y, en algunos casos, podría incluso resultar perjudicial, empeorando la calidad de vida de personas con condiciones preexistentes.
Dormir con el colchón en el suelo
Ya hemos establecido que dormir en el suelo es malo, pero ¿es bueno dormir con el colchón en el suelo? Aunque esta opción es preferible a dormir directamente sobre una superficie dura, tampoco es la ideal.
Si decides dormir en el suelo con un colchón, es importante considerar ciertos aspectos. Primero, la mejor práctica es no tener el colchón en contacto directo con el suelo; en su lugar, se aconseja utilizar una base o un somier.
Aunque no hay inconveniente si es una situación ocasional y no se dispone de un somier, es importante ser consciente de que, si el colchón se ubica sobre el suelo de manera regular, podría acumular moho y humedad.
Adicionalmente, es crucial asegurarse de que el suelo esté bien nivelado. Esto es esencial para garantizar una postura uniforme de la espalda y para prevenir deformaciones en el colchón que puedan resultar en una sobrecarga de la columna vertebral o de la zona lumbar.